Por lo general, una alimentación poco saludable, cargada de productos ultra-procesados, con altos valores de azúcar, sodio y grasas dañinas, suele traer al organismo efectos negativos tarde o temprano. Uno de los más comunes es la elevación de los niveles del colesterol en la sangre.
Según Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el colesterol es una sustancia cerosa y parecida a la grasa que se encuentra en todas las células del cuerpo que es necesaria para producir hormonas, vitamina D y sustancias que ayuden a digerir los alimentos.
Sin embargo, cuando los niveles de esta sustancia se elevan, puede aumentar el riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca, ya que es posible que se formen depósitos grasos en los vasos sanguíneos que con el tiempo crecen y hacen que sea más difícil que fluya suficiente sangre a través de las arterias.
Asimismo, esos depósitos grasos pueden romperse de repente y formar un coágulo que causa un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular, según Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación. Como tal, el colesterol alto puede heredarse, aunque suele ser el resultado de la elección de un estilo de vida poco saludable.
Por esta razón, es importante incluir en la dieta alimentos saludables para mitigar este problema de salud y reducir los síntomas si se padece. Entre los alimentos más recomendados están las frutas ricas en vitaminas y minerales. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS), aconseja comer al menos 400 gramos o cinco porciones de fruta y verduras al día.
Con respecto a lo anterior, el portal El Español, destaca la importancia del consumo diario de las nueces, un fruto seco que favorece la salud cardiovascular. Un estudio del Centro de Salud de la Universidad de Connecticut y la Universidad de Texas A&M, publicado en la revista Nutrients, afirma que “contienen una compleja variedad de compuestos naturales y fitoquímicos que exhiben una amplia gama de beneficios para la salud, incluida la protección contra la inflamación y el cáncer de colon”.
Además de esto, su principal beneficio viene de los ácidos grasos cardiosaludables. De hecho, esto lo afirma un estudio publicado en la revista Circulation asegura que incorporar una o dos raciones de nueces al día en personas mayores, tiene un efecto beneficioso sobre la composición de las lipoproteínas circulantes y reduce moderadamente el colesterol de las lipoproteínas de baja intensidad, conocida como colesterol malo.
Como tal, el autor principal del estudio y antiguo director de la Clínica de Lípidos del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Clinic de Barcenal, Emilio Ros, indica que “comer un puñado de nueces todos los días es una forma sencilla de favorecer la salud cardiovascular”. Durante la investigación, los participantes que consumieron nueces todos los días durante dos años no aumentaron de peso.
Propiedades de las nueces
De acuerdo con El Español, las nueces son el único fruto seco con una cantidad significativa de ácido alfa-linolénico, el ácido graso omega 3 vegetal que ayuda a mantener los niveles normales del colesterol sanguíneo. Por su parte, Ros, indica que “muchas personas están preocupadas por un posible aumento de peso al comer nueces por su contenido en grasa, pero esta grasa es saludable y nuestro estudio pudo comprobar que los participantes no aumentaron en absoluto su peso”.
Ahora bien, los investigadores del estudio en mención también analizaron todos los tipos de lipoproteínas mediante resonancia magnética nuclear y evidenciaron que las nueces mejoraban la calidad de estas sustancias, contribuyendo a una reducción del riesgo cardiovascular. De este modo, los resultados del estudio apoyan un efecto beneficio de la dieta de nueces sobre las subfracciones de lipoproteínas, con reducciones del colesterol de las lipoproteínas de densidad intermedia.