El colombiano tuvo un buen balance en triunfo que alienta la ilusión de los suyos en Superliga.
Fue un día en la oficina, pero uno de los buenos. Para James Rodríguez la tarea no fue sencilla, pero sí que justifico la expectativa que genera en la Superliga de Grecia.
El talento del colombiano fue definitivo para certificar la victoria 2-1 contra OFI, en un duelo que fue más complicado de lo esperado y que solo se abrió cuando el 10 activó la magia de su pierna izquierda.Con este cobro impecable de tiro libre, el creativo de Olympiacos abrió la puerta de la victoria: centro perfecto a Bakambu y todos a abrazarse pues se perdía en ese momento el partido 0-1 y parecía un batacazo.
Así fue el cobro, a los 40 minutos:
Olympiacos tenía la intención, el propio James era el director de la orquesta y se insistía una y otra vez, pero el portero salvaba unas y los delanteros fallaban otras.Por fortuna fue El-Aabi quien a los 76 minutos encontró el gol de la victoria 2-1 y reactivó la ilusión de un Olympaicos que persigue a los de la punta de la tabla.James suma su quinta asistencia vestido de blanco y rojo, un voto de confianza para él y una satisfacción para la Selección Colombia y Néstor Lorenzo, que lo encuentran cada vez en mejor forma.